Published On: Mar, dic 30th, 2014

RETORNO A MAGONIA: Auténticas anomalías celestes (Iª Parte: 1661-1829)

Share This
Tags

Publicado en EOC nº 77

OLYMPUS DIGITAL CAMERACuando fundé mi grupo de investigación Magonia Exchange en 2003, lo hice con dos intenciones. Primero, quería acumular más información histórica relativa a los OVNIs y temas relacionados que jamás se había recogido, aprovechando la nueva digitalización de bibliotecas y hemerotecas en todo el mundo. Segundo, la siguiente fase, siempre iba a ser el riguroso análisis de los datos recogidos. Puesto que no tengo formación científica, decidí rodearme de profesionales que sí la tenían y compartían mi visión. Entre los grandes pensadores académicos que he tenido el placer de traer al grupo destacan dos nombres, Jacques Vallée y Martin Shough. Con el primero publiqué un libro en 2010 (ya estamos preparando una edición nueva y revisada) y con el segundo estoy trabajando en otro. Este segundo libro lleva por título Return to Magonia (“Retorno a Magonia”).

Return to Magonia es el primer intento de analizar, con todos los recursos técnicos que tenemos a nuestra disposición en el siglo XXI, los casos más extraños y convincentes de los últimos 500 años. Ya que contiene datos procedentes de una amplia variedad de disciplinas –meteorología, astronomía, geografía, genealogía, etc.– acabamos cada capítulo con un breve resumen del caso y nuestras conclusiones.

Aquí presentamos un vistazo, en adelanto exclusivo, a una selección de capítulos que cubren el periodo 1661-1829. Los resúmenes son necesariamente breves, pero cada uno d ellos tiene una extensión de hasta 12 páginas de análisis y contrastes con casos modernos muy parecidos.

1) 1661-2 – El Mirabilis Annus, o el Año de Prodigios y Maravillas

En Inglaterra, en el siglo XVII, los activistas políticos publicaban noticias de extraños sucesos con el fin de mostrar que Dios apoyaba su causa. Estos incluían historias sobre fenómenos naturales mal entendidos como cambios meteorológicos inusuales, animales deformes, monstruos marinos y fantasmas; pero muchos otros se asemejaban a nuestros avistamientos ovnis modernos.

Hubo varios intentos de compilar estos incidentes en catálogos. El más extendido fue el Annus Mirabilis (“Año de las Maravillas”), que consistía en tres volúmenes, impresos en 1661 y 1662. A pesar de sus polémicos orígenes y evidente uso como propaganda, es el reflejo más completo del paisaje Forteano que poseemos de aquellos tiempos.

MAGONIANo podemos saber a ciencia cierta qué historias en esta colección se inventaron con fines políticos, pero sí hemos identificado unos cuantos que coinciden con fenómenos conocidos y reales, como Venus y cometas. Esto abre la posibilidad de que el Mirabilis Annus contenga informes de testigos auténticos, por lo cual planteamos la opción de que alguno de los OVNIs que describe también sea auténtico. Aquí tenemos un ejemplo:

“En Saint Stephens, una parroquia cerca de Salt Ash en el Condado de Cornwall, el 11 de mayo 1662, cuatro días antes de la llegada de la Reina, aproximadamente un cuarto de hora después de anochecer, varias personas dignas de crédito vieron una estrella muy grande, que parecía tener forma cuadriculada, y de ella salía la semejanza de dos piernas humanas, con pies, de un color sangriento profundo o como el fuego; entonces apareció una cosa negra, cuadrada, unas dos o tres pulgadas de ancho (o así los espectadores lo percibían) que se interpuso entre la estrella y las piernas rojas. Apareció otra estrella de brillo similar que se movía hacia adelante y atrás….”

2) 8 de abril de 1665, Stralsund, Alemania – Una batalla aérea y un “sombrero” o “plato” volador

MAGONIA image1-1 (2)Según textos publicados en la mitad del siglo XVI, se vieron numerosos objetos volando en el cielo cerca de la ciudad alemana de Stralsund en abril de 1665. Estos incluían buques bandadas de pájaros, fuego y humo, pero también un objeto con forma de plato o sombrero que se cernía sobre la iglesia de San Nicolás durante dos horas. El grueso de los testigos incluyó a varios pescadores que posteriormente se quejaron de enfermedades físicas como un temblor corporal y un dolor fuerte, principalmente en manos y pies. Afortunadamente, el incidente se documentó muy bien. Los informes incluyen el día y la hora -justo después de las 18:00 del 8 de abril- e ilustraciones contemporáneas que ubican el lugar aproximado en el cielo.MAGONIA FullSizeRender-5 (2)

Con simulaciones por ordenador podemos demostrar que no pudo haber sido el sol o la luna, y podemos descartar con seguridad las estrellas, los planetas y fenómenos meteorológicos como estímulo. Aunque nubes, humo o densas bandadas de estorninos podrían haber dado la impresión de que hubiera un objeto circular pasando por el cielo, la duración del avistamiento y su persistente forma hacen que esto sea altamente improbable. Por lo tanto, el evento de Stralsund es un caso notable y -cierto o no- debe ser considerado entre los primeros presuntos avistamientos de platillos voladores en la historia.

3) 1693-1905 – Gwynedd, Gales – Luces azules y rojas, “exhalaciones” del mar, incendios en los pajares y graneros

Se han visto extrañas luces en Gales al menos desde el siglo XVII. La primera vez que el fenómeno recibió atención seria fue cuando una llama azul emergió del mar y prendió fuego a varios pajares en Gwynedd en 1693, un incidente que aparece en las Transacciones Filosóficas de la Royal Society. No se encontró una explicación aunque algunos postularon la teoría de que se había encendido un gas emitido por una masa de insectos en descomposición. Esta idea fue rechazada casi en seguida.

MAGONIA 1693-1905 - Gwynedd, Gales - Luces azules y rojas (2)Se han documentado fenómenos similares en otros lugares de Gran Bretaña y en todo el mundo, pero en Gales las luces son de particular interés debido a que entre 1904 y 1905 coincidieron con un resurgimiento del fervor religioso en la zona entre Barmouth y Harlech. A menudo se cita este caso como un episodio OVNI clásico o evento forteano.

Las luces son reales pero siguen sin explicarse. Una solución une el fenómeno con los efectos de tensión tectónica. Hay investigadores que creen que la energía liberada en las líneas de falla podría explicar los fenómenos luminosos observados en las proximidades. De hecho, la falla Mochras pasa cerca de la capilla de Egryn que parecía ser el centro de las luces en 1904-5. Una oleada OVNI en 1977 se asoció también con líneas de falla en Gales. Sin embargo, los geólogos no han logrado identificar un mecanismo que pueda explicar el fenómeno o su periodicidad aparentemente aleatoria, y la ocurrencia de anomalías luminosos cerca de fracturas terrestres puede ser sólo una coincidencia.

4) 4 de noviembre de 1747, Océano Atlántico Sur – Bola de fuego azul devasta un barco

Un lema durante el Siglo de las Luces bien podría haber sido “Las afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias.” A medida que cambiaba el clima intelectual, los fenómenos forteanos recibían cada vez menos atención en publicaciones serias. En su lugar aparecían noticias y estudios de exploración científica más ortodoxa. Sin embargo, hubo algunas excepciones.

MAGONIA image1 (2)A finales de la década de 1740, la Real Sociedad se enteró de que una extraña “bola de fuego” había atacado a un barco. Ya que el rápido avance de la tecnología de navegación implicó un mayor entusiasmo por hacer mediciones científicas, el informe se estudió con curiosidad. Por desgracia, la primera (y única) redacción del caso incluyó una errata y faltaban algunos datos, por lo que a pesar de la localizar numerosas versiones de la historia (en publicaciones que abarcan más de 250 años), primero tuvimos que responder a tres preguntas básicas: ¿Quién lo vio? ¿Dónde ocurrió? ¿Cuándo ocurrió? Las respuestas fueron, respectivamente: la tripulación del HMS Lizard, en el Océano Atlántico Sur (probablemente en las coordenadas 41 ° 05′S, 1 ° 57′E), y, posiblemente, el 4 de noviembre de 1747 (y no en 1749 como se publicó en el informe original).MAGONIA FullSizeRender-3 (2)

En cuanto al fenómeno en sí, inicialmente descartamos que la causa fuera un rayo en bola. El evento produjo un olor sulfuroso, que es más probable que provenga de un evento que se originó bajo el mar, como un volcán submarino. De hecho, el Lizard parece haber estado viajando cerca de un grupo de volcanes cuando se produjo el incidente. Pero estos volcanes están actualmente inertes. Un problema adicional con esta solución es que una bola de gas probablemente no se mantendría estable durante un largo periodo y este fenómeno se mantuvo a lo largo de 3 kilómetros. De hecho, sobrevivió el impacto contra la nave, algo que una bola de gas no conseguiría. Y más extraño aún, hubo un dramático efecto magnético: hizo que enormes clavos saliesen volando del palo mayor del barco con tanta fuerza que quedaron clavados en los tablones de la cubierta. Estos efectos serían típicamente de naturaleza eléctrica. A la luz de la información que disponemos, sería un error no clasificarlo como una anomalía.

5) Abril de 1759, Longdon, Staffordshire – Cuatro meteoros “planas” “danzan” en el cielo

“De una carta de Birmingham nos llega la noticia de que el viernes, sobre las cuatro de la tarde, se vio en Longdon un meteoro pálido, y de forma aplanada, tan grande como la moneda de una corona, bailando en el aire, y después otro, un tercero y un cuarto, todo aparente, y al mismo tiempo todos parecían estar viajando en el mismo trayecto de oeste a este. Continuó durante 30 segundos, y luego desaparecieron en una nube. Llegaron con un gran trueno.”

En términos generales, “platillo volante” no es un sinónimo exacto de OVNI porque la mayoría de las anomalías aéreas que se documentan hoy en día no tienen forma de disco. Sin embargo, es difícil que cualquier forma circular y plana que se observa en el cielo sea un artefacto natural, por lo que prestamos especial atención cuando emergen en textos históricos. Este capítulo trata de cuatro objetos que aparecieron en el cielo de Staffordshire, Inglaterra, en 1759, y “bailaron” desde un lado al otro del cielo en treinta segundos. Se compararon con monedas.

MAGONIA FullSizeRender-4 (2)Si la descripción es correcta, eran grandes, un fenómeno local (en lugar de regional, como son los fenómenos meteóricos) y de larga duración. La forma que tuvieron los objetos es interesante porque esto recuerda al avistamiento seminal de Kenneth Arnold en 1947. Cuatro monedas que “bailan” y nueve platillos que “saltaron” evocan prácticamente la misma imagen mental.

6) 30 de septiembre, 1767, Río Isla – Una brillante masa destructiva sigue el transcurso de dos ríos

“Septiembre [...] Un fenómeno poco común se observó en el agua de la Isla, cerca de Cupar Angus, precedido por un espeso humo negro, que pronto se disipó, revelando un gran cuerpo luminoso, como una casa en llamas, pero después tomó la forma de una pirámide, y se movió hacia delante con ímpetu hasta llegar a Erick…”

En septiembre de 1767 un objeto luminoso visitó Perthsire en Escocia. Siguió a dos ríos, causando daños a propiedad, y luego se desvaneció. Algunos comentaristas modernos proponen que el evento fue un tornado o tromba marina. Es posible que las condiciones meteorológicas en aquel momento fuesen adecuados para producir un tornado, pero la descripción no encaja con esta interpretación.

Se crea un tornado de fuego cuando un fuego que preexiste en el suelo es “absorbido” por un tornado, pero este fenómeno parece haber sido intrínsecamente luminoso, y viajó una gran distancia sobre el agua. Se han documentado casos de resplandores eléctricos nocturnos causados por tornados, pero los testimonios son polémicos y realmente no se parecen mucho a éste. Del mismo modo, sólo existe evidencia anecdótica para suponer que los tornados pueden seguir rutas específicas sobre un terreno, como a lo largo de un río. Hemos llegado a la conclusión de que el fenómeno observado en 1767 carece de explicación del todo satisfactoria.

7) Verano de 1790, Carlisle, Nueva York – Una bola de fuego sigue el terreno

“SobMAGONIA FullSizeRender-2 (2)re las 9 de la noche un destello de luz apareció y aumentó hasta iluminar más que el sol de mediodía. Entonces oí un gran sonido en el norte. Vi un meteoro de fuego como un dragón a una distancia de unos 273 metros, 54 o 60 metros sobre el suelo. Se movió por el valle hasta que llegó a una colina cubierta de árboles altos, y entonces de pronto se elevó y pasó encima de los árboles para no tocarlos… Cuando llegó a otra colina, ascendió para no colisionar. Media unos 274 metros de largo con forma de serpiente con un cuerpo tan grueso como un buey…”

En 1790, John Matheus Brown (1745-1838) fue testigo de un extraño objeto ardiente que pasó cerca de él, en paralelo al suelo, en el condado de Schoharie, Nueva York. El caso es interesante porque contiene varios detalles técnicos que pudimos trabajar aunque lo que describió (a pesar de posibles errores de memoria) no se ajusta fácilmente a ninguna categoría de fenómeno natural.

El tiempo en el momento probablemente no era propicio para rayos en bola. Dudamos de que se trataba de un meteoro lejano que vio detonar por tres razones lógicas: hizo un sonido rugiente al pasar; desprendía considerable calor y un curioso olor; y su paso era demasiado errático para ser un meteoro. La observación también fue bastante larga, posiblemente unos tres minutos en total. Nada en la naturaleza pasa por el aire a baja altura y responde al terreno local como si siguiera un camino programado.

8) 20 de agosto de 1829, Halton, Leeds, Inglaterra – Una “luna” en el horizonte se divide por la mitad, emergen dos “figuras humanas”

EnMAGONIA FullSizeRender-1 (2) agosto de 1829, testigos en Leeds, Inglaterra, se sobresaltaron cuando un objeto que creían era la luna se dividió en dos mitades para revelar dos figuras humanoides flotando en el cielo. El avistamiento duró más de una hora.

Este caso es significativo porque no muestra indicios de haberse escrito con un motivo ulterior ni como una “historia de fantasmas.” Hemos considerado la posibilidad de que los testigos estaban confundidos por la observación de la luna a través de las nubes, pero los testigos también señalaron que el cielo estaba limpio.

En la fecha más probable del evento -20 de agosto de 1829- la luna no estaba llena. Es posible que fuera un espejismo pero esta teoría no encajaría bien con la descripción publicada. La duración del avistamiento sigue siendo un factor importante, ya que las ilusiones visuales causadas por fenómenos naturales transitorios raramente duran sesenta minutos.

Hemos localizado informes sobre seres humanoides que emergen desde, o que aparecen, al lado de la luna en documentos que se remontan al siglo XVII. Junto con informes similares de un “sol” que se separara por la mitad, éstos pueden ser considerados como precursores notables a los avistamientos de OVNIs modernos con tripulantes. No podemos ofrecer ninguna explicación definitiva.

9) 7 de agosto de 1869, Adamstown, Pensilvania – objeto luminoso se asienta y se convierte en una columna cuadrada de luz plateada

A mediodía del 7 de agosto de 1869, en las afueras de un pueblo de Pennsylvania, un “cuerpo luminoso” descendió en un campo vacío. Los testigos informaron de que se parecía a una columna cuadrada de unos tres o cuatro metros de alto por dos metros de espesor. En la luz del sol, “brillaba como una columna de plata bruñida.” El fenómeno se desvaneció gradualmente durante un período de diez minutos sin dejar rastro. Los residentes locales dijeron que eventos de este tipo habían ocurrido antes, pero no con tanta intensidad ni durante el día.MAGONIA FullSizeRender (2)

La fecha coincidió con un eclipse solar pero esto no ocurrió hasta mucho más tarde en el mismo día, así que lo consideramos una coincidencia. Por otro lado, hemos considerado la teoría de que era un halo de hielo o un pilar solar, pero por la hora del día la hemos descartado.

La presencia de un artefacto de vidrio o metal en el suelo que refleja el sol, junto con cristales de hielo cerca de la tierra, podría causar un efecto similar, pero es poco probable que se den estas circunstancias en agosto. Los testigos también señalaron que no encontraron nada inusual en el sitio.

La posibilidad de que la columna se debió a un fenómeno de luz natural -como luminiscencia tectónica o rayos en bola-, se reduce teniendo en cuenta que el “cuerpo” era visible a bastante distancia a plena luz del día y que no hay evidencias de que hubo terremoto ni tormentas aquella semana.

Chris Aubeck y Martin Shough

Descárgate gratis EOC nº 77 completo aquí: http://elojocritico.info/wp-content/uploads/2014/12/EOC-77-PDF.pdf

Displaying 1 Comments
Have Your Say
  1. Jero dice:

    Muy interesante este artículo, como todos en el ojo crítico.
    Me preguntaba si el autor tiene pensado hacer referencias a referencias más antiguas, sobre todo lo que escribió Plinio el viejo. Las referencias a lo que escribió Plinio el viejo lo leí en el escrito del Coronel Munaiz, enlace que está en la página del ufólogo Vicente-Juan Ballester y que aunque lo he buscado, no lo encontré. Un saludo

Dejar un comentario

XHTML: Tu puedes usar estas etiquetas html: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>