Publicado en EOC nº 70

Muy pocas veces, por no decir ninguna, se tiene en España la ocasión de presenciar un evento de estas características. Cualquiera habrá asistido alguna vez a Jornadas, Simposios o mal llamados Congresos dentro de estas temáticas, pero dudo mucho que lo hayan hecho alguna vez en un marco universitario. Y con ello no nos referimos al alquiler veraniego de una sala sujeta a un campus, sino al academicismo de tales eventos. En este caso, se ha logrado y con creces. Hasta allí nos desplazamos para contarlo en estas líneas…

La tarde del pasado martes 20 de marzo se realizaba, en el Aula Magna de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada, una actividad denominada “Alcances de la consciencia: estudio científico de las experiencias Psi”. Se trataba, ni más ni menos, que de disertar, durante tres conferencias y una mesa redonda, sobre el estudio científico de las mentadasexperiencias Psi (parapsicología), abordándose desde varias perspectivas, como por ejemplo la investigación experimental o su relación con aspectos clínicos. La entrada fue libre, y la citada actividad se reconoció con 0.5 créditos de libre configuración por la Facultad de Psicología granadina para sus alumnos. Y es que la investigación de estas cuestiones pasa, pese a quién pese, por su ámbito académico. Aviso para navegantes: quiénes crean que hacen algo productivo por estas cuestiones yendo a sitios abandonados con una grabadora, no sigan leyendo. Esto es otra historia.

El padre de la criatura, u organizador del evento, era Oscar Iborra, Doctor en Psicología por la propia Universidad de Granada y miembro, además, del equipo del programa Dimensión Límite. Iborra abría la tarde con una introducción necesaria, de nombre “Parapsicología: el estudio científico de las experiencias Psi”. Separando el grano científico de la paja esotérica, Oscar explicaba que la parapsicología es un campo de estudio que aplica el método científico al análisis de experiencias que se extienden más allá de los ortodoxos modelos científicos. De hecho, un dato que posiblemente  po cos conozcan, es que la parapsicología es una disciplina científica reconocida por la UNESCO en su Nomenclatura Internacional para los campos de la Ciencia y Tecnología. Este reconocimiento es también aceptado por nuestro país, desde que el entonces Ministerio de Educación adoptó, en 1975, esta misma nomenclatura. Concretamente le corresponde el código 6110 (dentro del código general 61: psicología). El objetivo de esta conferencia fue, como decíamos, ofrecer una visión introductoria y general de la investigación científica en parapsicología.

Después llegó el turno de José Miguel Pérez Navarro, con una ponencia llamada “Desarrollo de un Protocolo Experimental para la Investigación Exitosa de la PES mediante el Método Ganzfeld”. Y no hablamos de un simple divulgador de estas cuestiones al uso, sino de un Doctor en Psicología por la Universidad de Coventry (Reino Unido). Actualmente, profesor adjunto en la Universidad Internacional de La Rioja (Madrid) y anteriormente, investigador asociado y profesor titular en la Universidad de Greenwich(Reino Unido). José Miguel ha escrito diversos artículos sobre metodología en estudios de percepción extrasensorial (PES) en diversas revistas, tales como Europe’s Journal of Psychology, Journal of Scientific Exploration o Apuntes de Psicología. Y es que, desde que J. B. Rhine llevó a cabo los primeros estudios experimentales en percepción extrasensorial en la Universidad de Duke (Rhine, 1934), un amplio número de investigadores han explorado diferentes técnicas para alcanzar evidencia inequívoca del fenómeno de PES en el laboratorio. El método Ganzfeld ha sido el resultado de enormes esfuerzos hacia el desarrollo de un protocolo de experimentación que replicase, de manera sistemática, la fenomenología observada en los informes de casos espontáneos. Aunque los meta-análisis de los estudios que han usado esta técnica, muestran un efecto estadísticamente significativo de transferencia de información entre emisor y receptor que no puede ser explicado mediante el uso de las vías sensoriales tradicionales (Bem & Honorton, 1994; Storm & Ertel, 2001, 2002; Storm, Tressoldi, & Di Risio, 2010), aún hoy existe un problema de replicación y visibilidad del fenómeno. En este proyecto, así como en la conferencia, se relataban una serie de estudios (con sus consiguientes y llamativos resultados) realizados con la finalidad de desarrollar un protocolo de experimentación que permita la replicación robusta y visible de la PES en el laboratorio. A este respecto, José Miguel nos explicaba después de la jornada como realizó toda una tesis doctoral sobre el tema. Según sus propias palabras, éste realizó un trabajo “puramente de parapsicología, en una Universidad de Reino Unido, y no tuve ningún problema en absoluto. Investigué la hipótesis de la transferencia de información, lo que se conoce como percepción extrasensorial, y obviamente utilizando la misma metodología científica que se emplea en otras áreas de la ciencia. De hecho, no era el único estudiante de doctorado haciendo algo en estos temas en dicha universidad inglesa”. Pero ya se sabe… Spain is different.

La tercera ponencia corrió a cargo de Alejandro Parra, Doctor en Psicología por la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales de Argentina y actual presidente de la Parapsychological Association(PA), la asociación académica internacional, establecida en 1957, más relevante en el estudio científico de las experiencias Psi. La PA es una organización afiliada a la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS), editora de la revista Science desde 1969. Ahí es nada. Parra disertó sobre “Alucinaciones, experiencias parapsicológicas y percepciones paranormales: perspectiva clínica y estudio de casos”. Y es que, junto a su amplia experiencia en el campo de la investigación experimental en PES, Alejandro ha realizado múltiples estudios sobre: correlaciones entre experiencias anómalo/paranormales, disociación, absorción y propensión a la fantasía; estudios sobre experiencias alucinatorias en poblaciones no psicóticas; modelos para abordar el procesamiento de las reacciones emocionales ante experiencias paranormales (un abordaje clínico, desde una perspectiva psicológica y psicopatológica), así como diversos estudios sobre la experiencia alucinatoria con diferentes tipos de poblaciones. De hecho, en su ponencia, Parra narró las terapias realizadas por éste en Argentina con diversos testigos de fenómenos anómalos, así como del aislamiento y posterior descarte, si procedía, de las posibles psicopatologías de los mismos. El psicólogo argentino nos explicaba, sobre lo acontecido esa tarde en la Facultad de Psicología, cómo “este ha sido un espacio francamente envidiable, donde la universidad abre sus puertas para el tratamiento de temáticas que son poco comunes, para las cuales hay mucho escepticismo en el campo de psicología, acompañada de mucha ignorancia. Realmente este tipo de experiencias paranormales y los fenómenos Psi son temas tabú o simplemente ignorados”. En cuanto al futuro, Alejandro Parra argumentaba que, en el marco más académico, “lo paranormal es un campo digno de estudio como cualquier otro aspecto de la conducta humana, y en este sentido, espero que en el futuro se puedan promover otras actividades, con la meta final de introducir una cátedra o espacio formal de aceptación e investigación”. 

Para cerrar esta jornada histórica en nuestro país, se realizó una dinámica mesa redonda de nombre “Sentando las bases de la investigación Psi en España”. En ella, junto a Parra, Iborra y Pérez Navarro, participaron también Francisco José Tornay Mejías, Doctor en Psicología y Profesor Titular del Departamento de Psicología Experimental y Fisiología del Comportamiento de esa facultad; y Manuel Castillo Garzón, Doctor en Medicina y Catedrático de Fisiología de la misma Universidad de Granada. En dicha mesa redonda, se habló de varios temas relacionados con la académica investigación de estas temáticas, pero sin duda el asunto estrella fue el referido a los autodenominados escépticos (de los que niegan por sistema), que no se lo piensan dos veces a la hora de intentar dinamitar toda actividad de corte académica relacionada con estos temas. Pero pese a sus esfuerzos, aquí estamos, escribiendo esta crónica… y mucho me temo (por ellos) que no será la única.

Oscar Iborra, tras salir ya de la facultad, nos contaba cómo estaba “bastante contento, el aula magna estaba completamente llena. Incluso cuando hemos pasado la lista para que los alumnos se apuntasen con el fin de obtener su medio crédito, pensaba que estos se irían de la sala y finalmente no ha sido así”. En cuanto a la resumida conclusión de la actividad, Iborra expresaba que “la idea ha quedado clara, y era que la investigación de los fenómenos Psi está al margen de creencias y tiene cabida, si se hace de una forma científica y empírica, dentro de la universidad. Ahí está la participación de los ponentes tanto en las conferencias como en la mesa redonda”. Recordemos que estamos hablando de Doctores en Psicología y de algún Catedrático y Doctor en Medicina. Después, nos fuimos a cenar ponentes y servidor, extendiéndose la cosa hasta altas horas de la noche con muy buenas vibraciones e interesantes planes, de futuro académico, con estas cuestiones. Pero mucho me temo que lo allí comentado no puede contarse. Todavía…         

David Cuevas 

 Puedes descargargte EOC nº 70 en: http://www.dimensionlimite.com/eoc/EOC_70.pdf