Puede ser absurdo, pero ciertos autores de sitios web consideran la posibilidad de que la Anunciación de Carlo Crivelli conservada en la National Gallery de Londres, muestra algo ufológico. Lo que ellos consideran más sorprendente no es el rayo que baja del cielo  llegando a la Virgen María. Afirman que este rayo viene de un platillo, parado como un  objeto volador no identificado entre las nubes. Todas las reproducciones de los detalles relativos a la corona de nubes en el cielo son horribles, borrosas e indescifrables. Nadie parece haber buscado una mejor reproducción.

En el examen contrario, esta versión se extienden a partir de un sitio a otro, una y otra vez:

Aquí está el comentario, en este caso bastante cuidado, por Edicolaweb : “La pintura de Carlo Crivelli, conocido como” La Anunciación “, que se muestra en la Galería Nacional de Londres. En el cielo se encuentra un gran círculo luminoso, que a partir de un rayo de luz desciende, alcanzando la corona usada por María. “(Traducción de Inglés por el autor)

En un comentario publicado en un sitio diferente llamado “Los ovnis de Crivelli”, los autores afirman que, sin duda, el objeto se parece a un OVNI avistado en el Véneto (la región del norte de Italia) en 1999: “Lo que atrae nuestra atención es la peculiaridad de la forma de la nube. En efecto, parece ser bastante sólido, con una estructura circular y claramente diferente de cualquier otra nube que lo rodea. Cualquiera que sea el círculo del sol (emanación directa de la energía divina) o un objeto visto por Crivelli, así representado por sí mismo. Como prueba de esta última hipótesis sigue siendo el “espesor” del objeto “, que no es una entidad abstracta. Además la semejanza de la “nube” con un OVNI visto recientemente en el Véneto, en enero de 1999 es clara. El lector puede juzgar por sí mismo. “(Traducción de Inglés por el autor)

Por increíble que sea, los que parecen publicar estas cosas en realidad nunca han entrado en un museo. Si es así, se darían cuenta de que hay una gran cantidad de anunciaciones en las que un rayo desciende desde el cielo y llegar a la Virgen. Además, como en la pintura de Crivelli se refiere, se darían cuenta de que el objeto del cielo está formada por un círculo de nubes en cuyo interior hay dos círculos de pequeños ángeles.

Se trata de una forma muy común de representar la divinidad, visible en tantas obras de arte sacro. Por ejemplo,  en una Anunciación de Luca Signorelli:

Estas imágenes, por ejemplo, muestran el Más Allá en la cúpula de la Iglesia de Parma pintada por Correggio y una Virgen con el Niño de Lorenzo Lotto.

Gustave Doré mismo, a mitad de 1800, reanudó el patrón de la vorágine de los ángeles en las nubes en la siguiente ilustración del Paraíso de Dante, Canto XXXI.

Aquí están algunas otras anunciaciones que presentan mejores círculos de nubes, ángeles y rayos:

Aquí hay una serie de anunciaciones bizantinas que también presentan los rayos que descienden desde el cielo, viniendo de una forma abstracta, que representa a la divinidad:

Conclusiones:

En el cuadro “La Anunciación” de Carlo Crivelli no existen los ovnis: El rayo que llega a la Virgen viene de dos círculos de angelitos dentro de un círculo principal de las nubes, como en muchas otras representaciones de Dios que aparecen en pinturas  medievales y renacentistas.

Exaltación de la Eucaristía (Detalle de la Trinidad) por Ventura Salimbeni. Iglesia de San Pietro de Montalcino.

También está la discusión sobre el controvertido ovni o “Sputnik “de Montalcino. Este es el nombre a menudo utilizado por ciertos sitios ufológicos refiriéndose al objeto de la iglesia de San Pedro, en Montalcino, pintado a finales del siglo XVI por Ventura (o Bonaventura) Salimbeni. La página de Edicolaweb, por ejemplo, dice: “Recuerda de hecho a los satélites rusos artificiales”. Vale la pena mencionar que este tipo de hipótesis perdió fuerza después de la publicación del artículo de Samuel Ghilardi, Migliavacca Amos y Salmistraro Elenio: “El satélite de Montalcino“.

Los autores describen cómo la pintura ha-sido analizada por medio de fotografías tomadas a corta distancia y declara estar de acuerdo con Ion Hobana, y afirma: “Es muy interesante la interpretación de Ion Hobana, gran conocedor de los ovnis y autor del volumen óptimo “Enigme cerul istoriei” por ejemplo. Dijo que el objeto sería un antiguo mapa del mundo… en que el sol es visible y marcado por una forma primitiva de los meridianos y paralelos. Además, el cilindro pequeño sería la bisagra para poder fijar la esfera. Un ejemplo es visible en el Vaticano. Tras llevar a cabo los análisis sobre las fotografías y la pintura, se originan nuevos elementos a los que no se puede asumir para interpretarlo como OVNI, mientras que han sido numerosos los hallazgos de puntos en común con las representaciones religiosas de los griegos ortodoxos. En muchos iconos que vienen de Oriente, es posible darse cuenta de las esferas con los mismos símbolos y trazados, a partir de las representaciones solas de Cristo o acompañadas de la Trinidad. “

Aunque esta pintura demuestra ser, por lo menos, no tan diferente de cualquier otro examen del género. De hecho todas las pinturas de la Trinidad, en que está representado Jesús, el Padre y el Espíritu Santo en esta forma, por lo general se incluye el “Globo de la Creación” o “esfera celeste”, que simboliza no sólo la tierra sino el universo como un todo. En muchas pinturas adicionalmente también se presentan “varitas mágicas” usadas por Jesús y el Padre, “que son con frecuencia descritas como las antenas del Sputnik”.

Aquí van varios ejemplos. Las dos primeras son “La adoración de la Santísima Trinidad” (1640) de Johann Heinrich Schonfeld y “Misa de La Fondation de l’fin des Trinitaires” (1666) de Juan Carreño de Miranda. Ambas pinturas se exhiben en el Museo del Louvre, París.

Otros ejemplos de “esferas de la creación” y “antenas” en cuadros anteriores o posteriores al de Montalcino…

¿Qué se considera más extraño la pintura de MMontalcino? ¿El detalle visible en la parte inferior, ccerca de los pies de Jesús, que muchos autores describen como un “periscopio”?. El libro ufológico de Ion Hobana lo considera similar al pivote central  utilizado en algunos globos de la creación  y en uno específico que, según él, puede ser visto en el Vaticano. A pesar de los detalles en este tema no es un periscopio ni un pivote. Claramente visible en la esfera son por el contrario el Sol la Luna (respectivamente en la mitad superior y en la parte inferior izquierda), junto con las líneas que forman una T, también presente en otras muchas obras de arte sacro de la época.

El mismo tipo de representación en el ámbito astronómico está presente en otro cuadro, por Pieter Coecke , lo que ilustra la Trinidad.

Aquí, la Esfera Celeste grande es una escultura de Giacomo Colombo  en la Iglesia de la Trinidad de los Pueblos (cm.130 x 100 x H165), y el más pequeño está en las manos de Jesús y María en una pintura de Thomas Stephen Lunetti, donde la Esfera Celeste es muy similar a la pintada por Salimbeni.

Centrándose en este aspecto, cualquiera puede ver el zodiaco, el Sol, la Tierra -con su cono de sombra- y  la Luna, muy pequeña en la parte inferior.

Es una representación de la Sphaera Mundi , con la Tierra en el centro del Universo, realizado por la mano de Dios. Al lado, otra representación de la esfera celeste en un cuadro de Jan Provost titulado “Alegoría cristiana” (París, Louvre)

En este ejemplo, tomado de Minerva Britanna por Henry Peacham, en el centro de la esfera  no se  ve la Tierra, pero si el ser humano, y alrededor de él, el Sol, la Luna y las estrellas.

Conclusiones : La esfera, entre las figuras de la Santísima Trinidad en el “Esaltation de la Eucaristy” realizado por Salimbeni, no es un ovni. Ese objeto, pintado en muchas representaciones de la Trinidad, es un símbolo de la “esfera celeste”, y en este cuadro en particular contiene la ilustración del Sol y la Luna.

Crucifixión Catedral Svetitskhoveli, Mtskheta, Georgia.

Esta mala imagen, tal vez tomada de una revista, aparece en casi todos los sitios web dedicados a los ovnis en el arte.  Pero aquí ofrecemos una mejor imagen de más calidad en la que podemos ver todos los detalles.

Esta crucifixión, que se encuentra en un lado de la tumba de Sidonia en la Catedral Svetitskhoveli de Mtskheta , Georgia, y es uno de los casos más conocidos de la falta de comprensión de una obra de arte. Pero aquellos que están familiarizados con el simbolismo en el arte medieval entienden que no hay elementos misteriosos en este cuadro santo. De hecho en la mayoría de las crucifixiones realizadas en el estilo bizantino muestran los mismos “objetos” a cada lado de la cruz. Son el Sol y la Luna, a menudo representado con un rostro humano o la figura.

En una descripción de las escenas que rodean la crucifixión en una pintura bizantina tradicional: “En la parte superior hay cuatro ángeles… El ángel en la parte superior izquierda presenta una personificación femenina brillante… El ángel expulsa a una personificación oscura frente a la otra cara de la luna. Esta yuxtaposición de luz y oscuridad, positivo y negativo, es fundamental para la interpretación del Grupo Especial, que representa lo que la redención del hombre por la muerte de Cristo“. (^{http:// www.st-mary-mons.org/english/ancient_icon_of_crucifixion_13th.htm )}

Aquí está una pequeña muestra de crucifixiones en el estilo bizantino, que muestran el Sol y la Luna con los atributos humanos:

Pero no sólo en los iconos ortodoxos bizantinos se encuentra el Sol y la Luna en la crucifixiones. También ellos se encuentran en la obra de pintores como Durero, Crivelli, Raphael, Bramantino, y en los manuscritos de los iluminados medievales:

Conclusiones:

La Crucifixión Mtskheta no contiene  ovnis. Los dos objetos que se encuentran cerca de la cruz son una representación antropomorfa del Sol y la Luna, y se muestra en la misma forma en muchas otras crucifixiones bizantinas.

Crucifixión (Visoki Monasterio Decani, en Kosovo)

Esta crucifixión del siglo XIV, un fresco en el Monasterio de Visoki Decani, en Kosovo, es igual que el anterior, considerado una evidencia OVNI. Los dos objetos extraños, a los lados de la cruz, se consideran ovnis:

(Fotos cortesía Blago Archivos del Fondo, http://www.srpskoblago.org )

Esta es, según muchos ufólogos, uno casos de ovnis documentados en obras de arte más antiguos. Los primeros artículos publicados sobre ella aparecen en los años sesenta, en la revista “Spoutnik”. Este fresco fue “descubierto” por Alexandar Paunovitch, un estudiante de la Academia de las Artes de Yugoslavia en 1964. Después de esta publicidad temprana, las imágenes aparecen en muchos libros acerca de los OVNIs. En muchas páginas web se lee que los dos objetos en el cielo son, sin lugar a dudas, “naves espaciales con tripulación”.

Sin embargo se trata de un modelo iconográfico  de la crucifixión, muy común en la Edad Media. El “Descendimiento de la Cruz” de Benedicto Antelami en el Domo de Parma particolare se asemeja a la Crucifixión de Visoki Decani.

En los bordes de la composición, en la misma posición que en el fresco de Visoki Decani, el Sol y la Luna se representan como testigos a los humanos de la crucifixión. En ambas obras de arte, las figuras que representan al sol y la mirada de la Luna hacia la cruz, se encuentra en el centro de la composición.

El Sol y la Luna, representados como figuras humanas, son visibles en muchas pinturas sagradas bizantino-ortodoxas, tanto como hemos visto en el anterior apartado, dedicado a la Crucifixión de Mtskheta. Abajo, representación de un evangelio antiguo (el Tesoro de San Clemente, siglo XIV) Y un fresco bizantino moderno:

James Hall, autor del “Diccionario de los sujetos y símbolos en el arte”, escribe: “El sol y la luna, uno a cada lado de la cruz, son una característica regular de las crucifixiones medievales. Sobrevivieron en el Renacimiento, pero rara vez se ven después del siglo XV. Su origen es muy antiguo. Era la costumbre  representar el sol y la luna en imágenes de los dioses solares paganos de Grecia y Persia,  práctica que se llevó más en tiempos de los romanos, en las monedas que representan a los emperadores.(…) El sol se representa a veces como un simple busto de un hombre con un halo radiante, la luna como una mujer con la media luna de Diana. Más tarde se reducen en dos discos de fricción, la luna creciente HAVING dentro del Círculo, podrán ser sufragados por los ángeles. El sol aparece a la derecha de Cristo, la Luna a su izquierda. “

Dos marfiles del Musée de Cluny, en París, el Sol y la Luna están en los lados de la cruz:

A menudo, el Sol y la Luna estaban representados como personajes humanos conduciendo carros tirados por caballos y bueyes, como en este bajorrelieve de marfil, la unión del “Libro de los pasajes de Enrique II” del el siglo XI (Munich, Bayerische Staatsbibliothek) :

Una escultura de Benedetto Antelami en el Domo de Parma, con la historia de Barlaam y Josafat, donde el Sol y la Luna parecen ser “duplicado” en las figuras de la lucha contra el Día y la Noche.:

En el mismo monasterio de Decani, en una bóveda de nivel inferior, hay otras representaciones de la “humanización” del Sol y la Luna:

Conclusiones:

En el fresco de la Crucifixión Visoki Decani no existen los ovnis. Los dos objetos cerca de la cruz son símbolos antropomórficos del Sol y la Luna. La misma forma de representación que se encuentran en muchas otras crucifixiones bizantinas.

“

Annales” Laurissenses  Matthew Hurley, autor del sitio Ufoartwork.com describe a este personaje como un cruzado y afirma que la imagen se tomó de los Annales, es decir, Laurissenses Annales reinos francos. El hecho habría dicho el avistamiento de un OVNI en el año 776, durante el asedio del castillo de Sigiburg en el reino de los francos (ahora Alemania). La misma imagen fue tomada en muchos otros sitios de tema ovni, y recientemente apareció en un artículo titulado Daniela Giordano ¿Existen OVNIs en la historia del arte?

La Virgen y el Niño con San Juan, es exhibido en el Salón de Hércules, en el Palazzo Vecchio de Florencia, y fue objeto de varias potencias. La etiqueta dice Museo Sellaio Jacopo , pero en el catálogo de tarjetas (número 00292620) señala que la pintura es atribuida a Sebastiano Mainardi (1466-1513), pintor de la camarilla de Ghirlandaio que trabajó en Florencia a finales del 400. Se añade que hay claras similitudes con obras de Lorenzo di Credi , especialmente en la figura de la Virgen. Un estudio reciente realizado por Alberto Leanza (2007) propone como autor al “Maestro de Tondo Miller”, identificado por algunos como el hijo Sellaio de Jacopo…

Esta es la pintura que hizo debatir a los ufólogos, quienes ven en la escena, en la esquina superior derecha, detrás de la Virgen, el testimonio de un “encuentro cercano” con un objeto volador no identificado. En la escena vemos a un personaje que con la mano en la frente, mira hacia una aparición en el cielo. Con él está un perro, que también mira el objeto extraño. En un artículo de Daniele Bedini , publicado en el UFO Noticias – N º 7 (julio-agosto de 1996) leemos: “vemos claramente la presencia de un objeto en el aire, color plomo, y que se inclina hacia la izquierda con una” cúpula “o” torre “, al parecer, identificable como un platillo volante de forma ovalada y movimiento “.

Pero esta no es la única particularidad de la pintura. En la parte superior izquierda vemos la Estrella de la Natividad, con otras tres estrellas pequeñas o flames. Muy similar en la Virgen del Libro (1480) de Sandro Botticelli.

Estos detalles, “tres estrellas” y la “nube luminosa” nos dicen que esta pintura se refiere a una forma austera y rigurosa de entender, no sólo los temas sagrados, sino la vida de la ciudad entera que había sido predicada por Fray Girolamo Savonarola, justo en Florencia a finales del siglo XV. Tras la expulsión de los Medici, en Florencia se estableció la República, por lo que Savonarola orientó teocráticamente el ejercicio de una supervisión estricta (que ahora puede hacer una comparación en referencia a la República fundamentalista islámica del ayatolá Jomeini en Irán), e incluso llegar a las públicas “hogueras de las vanidades” de 1496-1497, cuando eran reunidas y quemadas las cartas de juego, dados cuadrados, peinados, adornos, libros considerados obscenos, hasta las pinturas y objetos preciosos. La predicación de Savonarola tuvo gran influencia en las obras de arte de ese período, y varios artistas como Sandro Botticelli, llegaron a negar la agrupación cristiana-pagana de muchos trabajos anteriores inspirados por los conceptos del neoplatonismo, y a pintar temas místicos en un estilo “más puro”, pero también más rígido, arcaico y didáctico.

El simbolismo religioso presente en esta Madonna regresa a una iconografía más antigua, ya que en Florencia, el humanismo y el neoplatonismo se había perdido. Las tres estrellas son visibles, por ejemplo, en las pinturas del siglo pasado, pero sobre todo en los iconos bizantinos de la Virgen. A menudo se retrata en una película (en los hombros y la frente), y otras veces se sustituyen por tres rayos , pero en todos los casos son un símbolo de la triple virginidad de María antes, durante y después del parto. Las res estrellas, con el mismo significado, se reflejan también en el emblema de la orden de San Felipe (Filipinas), especialmente dedicados a la Virgen.

Volvemos a la sección anterior, interpretado como el ovni. En muchas otras “Natividades” del  año 400 y 500 nos encontramos con una escena similar. Es s el anuncio a los pastores, como se dice en el Evangelio de Lucas:
“… los pastores estaban en los mismos países que respetan por la noche para cuidar sus rebaños. Un ángel del Señor se les apareció y la gloria del Señor brilló alrededor de ellos. Ellos se asustaron, pero el ángel les dijo: No temáis, os traigo buenas nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: os ha nacido hoy, en la ciudad de David un Salvador que es Cristo, el Señor … ». Aquí está la escena de los pastores tal y como aparece en el fondo de la Natividad de Vincenzo Foppa, y que se conserva en el Detroit Institute of Arts:

El ángel deja una nube oscura, en cuyo interior los rayos brillantes de oro y al igual que en la pintura del Palazzo Vecchio, la  escena es observada por un pastor con su mano en la frente:

Vemos esta misma escena, representado de manera muy similar a la de la Virgen y el Niño por el Palazzo Vecchio, en muchos otros cuadros que representan la Natividad o la Adoración del Niño, con el mismo pastor y el perro.

Estos son sólo algunos ejemplos de docenas de pinturas que tienen como objeto la Natividad. En fácil reconocer claramente el Ángel, y vemos que uno de los pastores casi siempre tiene su mano en la frente, como para proteger los ojos de la luz de la “Gloria de Dios”, que se refiere al pasaje del Evangelio. A menudo parece que incluso el perro mira la aparición. En muchos casos el ángel sale de una nube rodeada de luz, o en las primeras pinturas, de rayos dorados.  En una miniatura del manuscrito “Grandes Heures d’Anne de Bretagne” (1500-1508) de Jean Bourdichon, el ángel se aparece a los pastores saliendo de una especie de agujero en el cielo, entre en la Virgen y el Niño. Con San Juan Raffaellino Garbo sólo ven un rayo de luz en el centro de la nube:

En otra pintura de finales del siglo XV, la Virgen y el Niño con San Juan de Gherardo di Giovanni (Academia de Florencia), podemos ver el fondo a la izquierda de Nuestra Señora, lo que a primera vista parece una mancha oscura. Una observación más detallada que la mancha se muestra un ángel que viene de una pequeña nube y va hacia abajo, a la escena de la natividad, pero en este caso usted no ve los pastores en el fondo.

En otra ronda, que se atribuye a la escuela de Sebastiano Mainardi y se almacena a Sommariva Perno , vemos la misma escena con el pastor quien, con su mano en la frente, mira a la aparición del ángel vestido de rojo, con un perro  a su lado, con la boca abierta, mirando al ángel. En el centro, encima de la cabeza de la Virgen, aparece nube luminosa.

Sebastiano Mainardi era el hermano de Domenico Ghirlandaio, y había un nacimiento de este artista, con una estrella brillante que aparece en una nube. A la derecha aparece el ángel a los pastores.

Incluso en este detalle de otra Natividad de Domenico Ghirlandaio (arriba), donde vemos tanto el ángel como la nube luminosa, es curioso observar que, refiriéndose a esta pintura, hay quienes identifican un OVNI en la figura en el cielo: http:/ / www.teegeeack.com / extraterrestre ufo-secreto-ovni-video-photo.html

La pintura es más interesante, sin embargo, es una Natividad de Lorenzo Mónaco (1409) en el Museo Metropolitano de Nueva York. Por encima de la Virgen aparece en una nube rodeada de rayos de oro, muy similares a la del Palazzo Vecchio, y el Ángel, que viene de otra nube luminosa, hace el anuncio a los pastores:

Fragmentos de una capa de pan de oro son todavía visibles en la ronda de la nube del Palazzo Vecchio, y también es posible que en un principio esto sería presentar un marrón de oro que la cubría por completo.

Así, podemos identificaren  la Virgen y el Niño con San Juan expuesto en el Palazzo Vecchio, la nube luminosa que también está presente en la pintura de Lorenzo Monaco, y la escena en que se describe el anuncio a los pastores en el Evangelio de Lucas. Pero en esa historia de la Natividad no estamos hablando de nubes brillantes. ¿De dónde viene esta representación en particular?

Durante el Renacimiento, en el arte sacro no sólo estaban representadas escenas de los cuatro evangelios canónicos. Muy a menudo se recurrió a los textos de devoción más recientes, llenos de personajes y acontecimientos de estilo más popular y narrativo. Las muchas escenas que representan la Presentación de María en el Templo o el matrimonio de la Virgen  (pintado por Giotto), o el encuentro entre Jesús y Juan el Bautista en la huida a Egipto (pintura de Leonardo en la Virgen de las Rocas) se derivan de cuentos ajenos a los Evangelios de Marcos, Mateo, Lucas y Juan. Los artistas y sus mecenas, eligieron temas, en historias muy a menudo mezcladas y procedentes de diferentes textos, como la Leyenda Dorada de Jacobo de la Vorágine , el Meditatione Vitae Christi de Juan De Cauli, o los muchos evangelios apócrifos . La presencia del buey y el asno, la vemos en casi todas las de la Natividades, como se narra en los evangelios canónicos, pero no en dall’apocrifo Pseudo-Mateo, uno de los textos más utilizados como fuente de temas de artistas de la época . Este  evangelio a su vez deriva del Evangelio de Santiago , conocido sólo en griego para la traducción latina de Guillaume Postel a mediados del siglo. XVI. Las historias de estos textos fueron inspirados por los relatos de la infancia de Giotto, de la capilla de los Scrovegni de María. Justo en el Evangelio de Santiago nos encontramos con una descripción de la natalidad, que no contiene a los ángeles, o la “Gloria de Dios”, sino una “nube luminosa”, como en muchos otros pasajes bíblicos : [19, 2] Se detuvieron en el lugar donde estaba la cueva, y he aquí una nube luminosa cubrió la cueva. Y la partera dijo: “Hoy mi alma se magnifica, porque mis ojos han visto un gran milagro. Nació por la salvación de Israel. Y al instante desapareció la nube de la cueva y apareció una gran luz, por lo que nuestros ojos no podía soportar … (Los libros apócrifos, editado por Marcello Craven, Torino, 1969, p.21)

A diferencia del Evangelio de Lucas leemos que “la gloria del Señor brilló alrededor de ellos,” en este pasaje, el narrador agrega que “los ojos no lo podía soportar” la gran luz. Y en tantos cuadros vemos que, tras la letra del texto, el artista ha pintado el pastor que protege los ojos con la mano.

En el mismo Protoevangelio encontramos la descripción de la Estrella, pero lo más importante, a diferencia de los evangelios canónicos, se dice que el niño Juan el Bautista, el primo de Jesús, tuvo que huir de Herodes:
[22, 1] al darse cuenta, por los magos, Herodes se enfureció y envió a los asesinos, diciendo: “. Mata a los niños de dos años y bajo” [2] María, después de haber oído que los niños estaban siendo asesinados, tomó al bebé envuelto y lo puso en un pesebre de los bueyes. [3] Isabel también oyó que Juan estaba llorando, lo tomó y se fue a la montaña, mirando a su alrededor, dónde esconderse, pero no había ningún lugar donde ocultarse. Isabel, entonces, suspirando, dijo en voz alta: “Montaña de Dios, recibe a una madre con su hijo.” Y la montaña se abrió y dio la bienvenida. Y una luz brilló sobre ellos, porque un ángel del Señor estaba con ellos.

Aquí, en este pasaje del Evangelio de Santiago “luz” se identifica con un ángel de la guarda, sin que aparezca como un personaje en sí. En el Evangelio de la infancia apócrifo árabe-sirio es la estrella de los Reyes Magos la que se identifica con un ángel: “En ese momento, un ángel se les apareció en forma de estrella que había sido su guía en el camino…. “

La representación de la nube sin el Ángel es rara, pero, además de la Natividad de Lorenzo Monaco donde se muestra, podemos ver un ejemplo en un cuadro de la Adoración del Niño de Franke. En el cielo se ve la nube de la estrella. El mismo autor en otra obra representa la mano de Dios dentro de la nube, mientras que el ángel hace el anuncio a los pastores.

Bussagli Marcos es el autor de varios libros sobre la iconografía de los ángeles. En particular, en “La historia de los ángeles” (Rusconi, 1991) cita los estados de pseudo-Dionisio en que “la Escritura los representa en forma de nubes… “. El Bussagli mismo, en el catálogo de la exposición Las alas de Dios, escribe, “En general, la Edad Media un período que resultó fundamental para el desarrollo de la iconografía de los ángeles, cuyas soluciones fueron reinterpretadas más adelante en forma natural, por las sucesivas culturas del Renacimiento y el Barroco. En el caso de la “nube de ángeles”, fueron revisadas ​​más adelante como figuras aladas apoyados por suaves almohadas de vapor de agua“.(http://www.enec.it/AliDio/09e_Iconografia.pdf )

En “La anunciación a los Pastores” de Sano di Pietro (mediados del siglo     XV) vemos una representación intermedia del ángel como criatura alada, y como nube.

Por lo tanto, puede llevar incluso la ronda con la Virgen y el Niño con San Juan de la tradición iconográfica de la época, que el final de 400 en Florencia (recordando también que San Juan Bautista es el santo patrón de Florencia). El detalle arcaico de las tres estrellas que simbolizan la virginidad de María triples, y la representación no es un carácter antropomórfico sino como una “nube luminosa” puede sugerir una membresía a la tesis del autor Girolamo Savonarola , un fraile dominico que predicó un volver a la tradición y la pureza en la vida y en la ciudad. Ficha del Museo de Palazzo Vecchio de esta pintura, se dice que hay claras similitudes con obras de Lorenzo di Credi. Sólo este artista fue uno de los más devotos seguidores de Savonarola, llegando a quemar todo el dibujo de desnudo y convertirse en un monje sí mismo.

Conclusiones: En la pintura titulada Virgen y el Niño con San Juan, atribuida a Sebastiano Mainardi, el artista de la camarilla de Ghirlandaio, no existen los ovnis. Las tres pequeñas estrellas, que en esta imagen acompañan a la más grande de la Natividad, se utilizan a menudo como símbolo de la virginidad triple de María. El pastor que vigila la aparición en el cielo  protegiendo sus ojos con la mano es similar a muchas otras pinturas de la misma escena. La nube luminosa, viene de la historia de la Natividad del apócrifo Evangelio de Santiago . El Protoevangelio, que contiene las historias de la infancia de María, es uno de los textos más citados en la definición del dogma de la virginidad de María.

Por otro lado, en enero de 2011, en el programa de televisión “Misterio” se ha propuesto una nueva teoría. Para hacer frente a la hipótesis ovni se le preguntó Vittorio Sgarbi. El aclamado artista y comentarista televisivo ha dado su interpretación de esta obra, indicando que el objeto en el cielo no sería nada más que una mancha, un error del artista, lo que demuestra que él nunca ha visto el original o una buena reproducción fotográfica de la pintura en cuestión…

                                                           Diego Cuoghi