Publicado en EOC nº 94

Mi amigo Ángel

El 20 de enero fallecía en un hospital de Madrid a los 69 años mi buen amigo Ángel Moleón García, experto en vamirismo y en el enigma de Rennes-le-Chateau y su protagonista, a quien admiraba, el sacerdote Berenger Sauniere. Le conocí hace más de treinta años, cuando nos reunimos con otro amigo común especialista en mundos subterráneos, Juan Carlos Menéndez, corresponsal epistolar de Ángel desde comienzos de los 80. Resulta que, pese a residir ambos en Madrid no se conocían personalmente, así que tomé la iniciativa y Menéndez y yo quedamos con Ángel y su entonces mujer, Montse, para conocernos y charlar sobre los temas que habían tocado en su correspondencia.

De todo esto hablé un poco en mi artículo con Vicente Orozco sobre el vampiro de Borox (EOC 72) donde identificamos al abogado madrileño que informó a Miguel G. Aracil en 1983 de lahistoria del ataúd maldito, con múltiples difusiones y versiones exageradas hasta que Jordi Ardanuy y sus colaboradores empezaron a aclarar la verdadera naturaleza de esta leyenda contemporánea, y nosotros ampliamos revelando quién era la misteriosa fuente informativa de Aracil, durante años, sólo identificado con las siglas “D.A.M.” (supongo que Don Ángel Moleón) y el origen literario de la historia.

Mi amigo también me facilitó un contacto excepcional, el de Jorge Cela Trulock, hermano menor de Camilo José y casado con María, una prima suya. Gracias a Jorge supe de un macabro suceso de la crónica negra española acaecido en Orense en 1971 y que guardaba inquietantes paralelismos con el caso del sastre parricida José María Ruiz que asesinó a su familia en 1962 (EOC 83-84).

Podría citar un montón de anécdotas de Ángel, destacando las que vivió en sus viajes por el sur de Francia en pos de enigmas cátaros y todo lo que rodeaba al archifamoso cura de Rennes, a partir de una temprana lectura del libro que empezó a popularizar el tema, “El oro de Rennes” de Gérard de Sède, uno de los primeros títulos de la mítica colección Otros Mundos de Plaza & Janés. Y otras muchas vividas y escuchadas durante las numerosas charlas y tertulias celebradas con el historiador y conservador Julio González Alcalde, amigo suyo de la quinta de “El retorno de los brujos”, la obra seminal de Pauwels & Bergier que inició a tantos jóvenes españoles en los años 60 a los temas heterodoxos.

Manuel Salazar, ufólogo madrileño

En los últimos años, este veterano ufólogo regresó a la palestra gracias a las redes sociales, con un perfil en Facebook donde intercambió recuerdos y experiencias con Manuel Carballal y otros colegas del misterio. Pero aquella actividad finalizó de pronto, sumiéndose de nuevo en el silencio, y con su cuenta inactiva. Aquello no presagiaba nada bueno y lo comentamos varios compañeros durante alguna comida ufológica. En diciembre pasado me llegó de Facebook uno de sus típicos avisos de cumpleaños, en este caso el de Salazar. Por curiosidad me asomé a su cuenta y entre las felicitaciones igual de típicas vi una que me sorprendió de Emma Salazar en tono nostálgico y que le llamaba por un diminutivo… El mismo apellido podía ser una coincidencia, pero al mirar las entradas del año anterior en la misma fecha (15 de diciembre) leí otra felicitación de la misma persona que hizo saltar las alarmas: “Felicidades Manolín, pásalo muy bien ahí en el cielo. Te quiero”.

A primeros de este año y en el curso de varios intercambios con Nacho Cabria sobre la historia de la ufología madrileña, el nombre de Manuel Salazar salió varias veces como uno de los investigadores más destacados de los años 80, con el rescate en su archivo de una curiosa entrevista a Salazar y Emilio Martino (no Martínez, como alguien corrigió a mano) de 1983 firmada nada más y nada menos que por Antonio José Alés, para la Hoja del Lunes de Madrid… así que decidí buscar en una vieja agenda antiguos teléfonos suyos para saber qué había podido ocurrir. Tuve suerte porque a finales de enero pude localizar y hablar con Emma Salazar, y desgraciadamente todo se aclaró: en efecto era la hermana de Manuel, y con emoción contenida confirmó que había fallecido con 59 años en octubre de 2018 tras una dura enfermedad.

Unos días después le dediqué un pequeño homenaje en la presentación de la reedición de “Hay otros mundos pero están en éste”, efectuada en la Casa del Libro de Gran Vía, en Madrid. Tenía mis motivos, puesto que en el capítulo que escribí sobre la película “El hombre que vino de Ummo / Los monstruos del terror y sus circunstancias”, reconocía a Salazar el mérito de haberme descubierto esa curiosa pista ummita entre otras que recopiló en un texto fotocopiado bajo el título “Tras la pista de Ummo – 2″, finalizado en 1984. Además, el ufólogo madrileño fue uno de los puntales en la segunda etapa del Colectivo Ovni de Madrid en 1982-83, y se recuerda un interesante artículo suyo sobre los avistamientos y otros hechos misteriosos ocurridos entre finales de los 70 y principios de los 80 del siglo pasado el pantano del Atazar y su entorno al norte de la Comunidad de Madrid, publicado en 1989 en Cuadernos de Ufología y Karma.7.

Era ingeniero de Montes, trabajó en Correos, y su hermana me dijo que también había colaborado en el semanario de sucesos El Caso.

Xavier Penelas, un ummólogo discreto

Conocí a Xavier en 2015 durante una reunión en Madrid sobre el asunto Ummo. Me pareció un hombre amable y simpático con quien ya había coincidido, pero sin conocerle, unos cuantos años atrás, en otra reunión algo más concurrida: el coloquio sobre la Síndone de Turín celebrado en el hotel Sanvy de Madrid, el 20-N de 1988.

Xavier trabajó en la hostelería y fue conocido durante mucho tiempo por ser el marido de Hiltrud Nordlin, la antigua secretaria y mujer de confianza de Rafael Farriols no sólo en sus actividades empresariales sino también en lo concerniente a Ummo, puesto que ambos fueron claros exponentes del grupo de Barcelona animado hasta su muerte por Farriols.

Xavier Penelas falleció el 20 de febrero a los 80 años tras complicaciones derivadas de un segundo ictus sufrido en el margen de unos pocos meses. En 2018 dio a conocer en la novela “UMMO – Tras sus huellas” firmada con Quintín García Muñoz sus recuerdos y anécdotas del asunto Ummo, y de la reseña de un libro anterior copio lo siguiente: Xavier Penelas es conocedor de la filosofía budista y esotérica, religiones, angeología, egiptología, astrología, idiomas… Conferenciante en

centros culturales como la Sociedad Teosófica, la Asociación de Amigos de la India en España o de la Escuela Arcana de Ginebra. Invitado por la Universidad de California y más tarde por la Universidad de Londres para exponer su tesis sobre el síndrome de la parálisis del sueño. También fue colaborador de Televisión de Girona y varias emisoras de radio.

José Juan Montejo